Festejan el XV Aniversario Sacerdotal del Presbítero Felipe
René Tlayeca Soledad
La familia Minor Alonso acompaño al presbítero en esta
gran celebración
SAN MARTÍN TEXMELUCAN, Pue.- Con una misa, familiares y
amigos del párroco Felipe René Tlayeca Soledad festejaron el XV Aniversario de
su Ordenación Sacerdotal, teniendo de invitados a los párrocos Amancio Vidals.
La celebración eucarística dio inicio a las 14:00 horas
en la iglesia de El Carmen, en un momento de la homilía, tomando el micrófono el
párroco Felipe René Tlayeca oriundo de este municipio, comenzó a citar las palabras del evangelio dando lectura
de la primera carta del apóstol San Pablo a los corintios, el cual hablo del
amor.
En ese sentido hablo del amor, no de los detalles que
aparentan amor, sino del amor verdadero ese que se entrega sin condiciones, sin
presiones, El amor es comprensivo,
el amor es servicial y no tiene envidia; el amor no es presumido ni se
envanece; no es mal educado ni egoísta; no se irrita ni guarda rencor; no se
alegra con la injusticia, sino que goza con la verdad. Disculpa sin límites,
cree sin límites, espera sin límites, soporta sin límites.
Aunque hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, no soy más que bronce que resuena o platillos que aturden. Aunque tuviera el don de profecía, penetrara todos los misterios, poseyera toda la ciencia y mi fe fuera tan grande como para cambiar de sitio las montañas, si no tengo amor, nada soy. Aunque repartiera en limosnas todos mis bienes y aunque me dejara quemar vivo, si no tengo amor, de nada me sirve.
Aunque hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, no soy más que bronce que resuena o platillos que aturden. Aunque tuviera el don de profecía, penetrara todos los misterios, poseyera toda la ciencia y mi fe fuera tan grande como para cambiar de sitio las montañas, si no tengo amor, nada soy. Aunque repartiera en limosnas todos mis bienes y aunque me dejara quemar vivo, si no tengo amor, de nada me sirve.
En el momento de la homilía agradeció a su familia y amigos
su presencia y destacó como su madre sin imaginar que uno de sus hijos estaría
destinado al servicio de Dios, cuando se caso, le ofreció a nuestro señor, que
uno de sus hijos estaría dedicado a la vida cristiana, ya sea como sacerdote o
monja, sin imaginar que esto verdaderamente sucedería, al culminar él, el
bachiller y decirle a su madre su interés por dedicar su vida al sacerdocio, su
madre mostro una gran satisfacción por esta decisión.
Cor mo en todo se dice fácil 15 años pero son toda una vida
dedicadas a servir a dar la vida por sus semejantes, al agradecer en conjunto
todos los presentes al celebrar que Jesús es nuestro pastor, que todos hemos
sido llamados por él, sacerdotes, religiosas y todos aquellos laicos han sido
llamados a seguir a jesus en las estructuras sociales diversas de nuestra
realidad diocesana, hoy junto con ustedes quiero que esta eucaristía sea un
“himno de gratitud a Dios” por todas sus bendiciones.
Más tarde el párroco acompañado de sus familiares y amigos se
trasladaron a un conocido salón social donde degustaron una exquisita barbacoa
acompañada de consomé, ricas salsas sin faltar el tradicional pastel, en un
ambiente de paz y armonía.
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